Write My Destiny. (5.0 stars)Prólogo.
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Inglaterra.
Bradford.
Gallagher's House's.
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1996
27 de Abril, 08:54
Un día lluvioso, el señor Gallagher deambulaba en la calle con unas botas que rechinaban contra el concreto, su gorro tapaba un poco su vista y su chaqueta rozaba su mejilla derecha, un poco sospechoso. Después de haber cruzado distintas cuadras estaba de pie frente un chico muy alto y su cabello relucía, consigo llevaba unos penetrantes ojos grises plomo y una sonrisa en su cara no tan convincente.
— ¿Qué necesitas Gabe?
— Sabes Gallagher, me gustaría ser recibido de una forma agradable. —sonrió débilmente-, tu hija está en riesgo.
Hubo un silencio largo e incómodo.
— ¿Riesgo?, ¿a qué te refieres? —dijo confundido.
— Eso es todo lo que sé.
El sr. Gallagher asintió y se fue por el mismo camino de su aparición, estaba totalmente angustiado y tratando de buscar la forma para actuar normal, para tomar los gestos adecuados, para ensayar su diálogo. La pequeña Destiny estaba en peligro.
Los pensamientos de Gallagher estaban fundidos en sólo una cosa, su hija, después de recorrer la misma rredoma ambiguamente se resignó y prosiguió caminando entre las esquinas y rebasando cuadras, llegó a una taberna con estilo antaño-vintage, un poco más arriba de la puerta principal estaban colocadas las siglas ‛7 Albion Road’ e ingresó, la misma era desaliñada y un tanto añeja por decirse así; Gallagher tomó un taburete y se sentó, deslizó su brazo derecho sobre la barra y una chica le atendió amablemente.
— Buenas tardes, ¿puedo ayudarle? —colocó un lápiz ensima de su oreja.
— Una pequeña porción de Cazique², por favor. —respondió amistoso.
La chica asintió sonriendo y en cuestión de sengundos estaba un pequeño baso lleno de Cazique, Gallagher sonrió y en un solo sorbo terminó aquella bebida.
Los minutos transcurrían y Thomas vagaba por las calles de Bradford, dejó de pensar y tomó camino a su inmenso hogar, al llegar sonrió frente a la misma y adentró sus manos en sus bolsillos, giró el picaporte y se recostó en el marco de la puerta, las únicas dos mujeres que lo hacían feliz, Evangeline & la pequeña Destiny, estaban abrazadas frente la chimenea, Thomas verificó y ambas estaban completamente dormidas.
Gallagher subió las escaleras silenciosamente y se tiró vagamente sobre su cama boca abajo y el simple tacto hizo que éste cayera dormido.
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